La duda es la semilla que mata el alma

¡Bienvenidos al rinconcito de mi alma!

En esta ocasión os dejo otro pedacito de mis sentimientos

La duda es la semilla que mata el alma

Dudas-La duda es la semilla que mata el alma

Cuántas veces nos sentimos deprimidos/as y por muchas vueltas que le damos "al coco" no hallamos solución...

Creo que es por no estar totalmente realizados, por luchar con una dualidad que nos corta el aire. Queremos hacer/ser una cosa porque así la sentimos y deseamos, pero acabamos haciendo/siendo otra.

Y esa duda, es la semilla que mata nuestra alma. Debemos dejarnos llevar y hacerlo con nuestro cuerpo, mente y alma al unísono.

Solo asi, podremos mirarnos a los ojos ante el espejo y ver nuestro verdadero rostro, el de nuestra alma.

Pero tengo que reconocer que la teoría es la parte fácil y bonita y la práctica, es la complicada...

Con cuántos "pellizcos y nudos en la garganta" nos acostamos a lo largo de cada semana por comportamientos inadecuados... que nuestro orgullo no nos permite "reconocer" y echar marcha atrás, porque ello implicaría sentirnos débiles y cuán equivocados estamos... con ello, seríamos valientes y creceríamos más rápido...

Perdídos-La duda es la semilla que mata el alma

Preferimos seguir hacia adelante, pese a quien pese con nuestro orgullo intacto... aún empequeñeciendo a cada paso caminado y sintiéndonos perdidos por el camino... pero eso sí, hay que "disimular" ante la sociedad, con la cabeza bien alta.

Demostrar nuestras derrotas puede ser una batalla perdída, pero no hacerlo... sería perder la guerra. 

Un abrazo,

Rosa Macías

Si o No

¡Hola Chicos/as!

En este artículo vamos a hablar de la importancia de saber decir 

 Sí o No

en un determinado momento de nuestras vidas.

La duda mata-Si o No

Nuestro vocabulario es muy rico. Tenemos palabras y frases que nos permiten expresar lo que pensamos o sentimos. Pero en mi opinión, ninguna con el poder del "Sí" o el "No".

Formadas con tan solo dos letras cada una, tanto una como otra pueden cambiar el presente o el futuro de un individuo, familia, nación o la humanidad. Ciertamente, son opuestas y totalmente diferentes.

Mientras que el Sí nos abre puertas y nos permite ganar amigos y construir relaciones, el No levanta murallas, cierra puertas y destruye nuestras amistades. En ciertas ocasiones, el mal comprendido No puede convertirse en un gran aliado, cuando defendemos nuestros derechos y es un excelente auxiliar como respuesta a situaciones que nos perjudicaría no utilizarlo.

Decir Sí-Si o No

Te invito hacer un analisis mental para ver cuantas veces dijiste Sí 

cuando lo que realmente quisiste decir era No. 

A esto le podemos llamar un Sí por fuera y un No por dentro.

Por ejemplo:

-"Me puedes prestar tu coche?"

-Sí (por fuera - pero por dentro pienso "Y si lo necesito?, prefiero no prestárselo").

Entonces comienza la batalla del poder del Sí, (complaciente) y el poder del No (que hace que me enoje más conmigo misma por no expresar lo que realmente pienso).

Enojada conmigo misma-Si o No

Cuando debo dar una respuesta ante cualquier pregunta o situación no lo hago de manera impulsiva. Permito primero que mi exterior e interior esten de acuerdo con la respuesta que pretendo dar.

Te exhorto a armonizar tu exterior con tu interior, 

para que tu Sí como tu No 

sean por fuera y por dentro igual.

De esta manera, no habrá desacuerdo y te garantizo que tu salud mental y física te lo agradecerán. 

Un abrazo,

Rosa Macías